viernes, 19 de octubre de 2007

Agua Cristalina entra al negocio de bebidas frías.


ARTÍCULO TOMADO DE CAPITAL FINANCIERO.


Luego de 20 años de estar dedicada a la producción de agua purificada, Agua Cristalina, S.A. ha tomado la decisión de incursionar en el negocio de las bebidas. Un proceso en el que el primer paso ha sido lanzar al mercado uno de los productos cuyo consumo ha crecido significativamente en los últimos años, pero en el los consumidores tienen menos opciones para elegir, el té frío.


El producto es elaborado con agua purificada, té natural, sabor natural de limón, ácido cítrico y ácido ascórbico, además de benzoato de sodio y sorbato de potasio como conservadores, y puede adquirir en dos presentaciones, 16 onzas (0,5 litros) y 32 onzas (1,0 litros) cuyo costo al consumidor es de $0,75 y $1,25, respectivamente.


Raúl Montenegro Vallarino, gerente general de Agua Cristalina, S.A., explicó que el lanzamiento al mercado de este Té frío responde a la necesidad de esa empresa de diversificar su producción y ofrecerle al consumidor panameño la posibilidad de contar con productos de alta calidad a buen precio.


Indicó que además del Té frío, Agua Cristalina, S.A. ha lanzado al mercado y una línea de jugos de frutas, la cual es producto de una alianza con una empresa mexicana para comercializar en Panamá la marca Jugus, lo que demuestra su intención de incursionar seriamente en el mercado de bebidas frías, un negocio que mueve anualmente unos $40 millones y que es dominado por marcas como Bonlac y Estrella Azul.


La incursión de Agua Cristalina, S.A. en el negocio de bebidas frías no parece preocupar a Marco Ameglio, vicepresidente ejecutivo de Sociedad de Alimentos de Primera, S.A que produce las bebidas Bonlac, ya que a su juicio es normal que una empresa que por 20 años ha producido agua embotellada quiera diversificar su oferta incursionando en nuevos segmentos del mercado como la venta de té frío y jugos.

Cerveza Balboa refresca su imagen.


ARTÍCULO TOMADO DE CAPITAL FINACIERO.


A partir de esta semana la casi centenaria cerveza Balboa refresca su imagen. Esta bebida producida localmente por Cervecería Nacional, empresa controlada por el grupo SABMiller, cambió su etiqueta, tapa de la botella y el tamaño del producto con el objetivo de reconquistar al consumidor panameño.


El consumo per cápita de cervezas en Panamá está en alrededor 53 litros y las ventas anuales de esta bebida superan los $100 millones. Cifras de la Contraloría General de la República revelan que la producción anual de cerveza ha venido creciendo en los últimos años. Solo en el 2005 se produjeron 167.370 litros y para el 2006 esa cifra aumentó en 167.370, es decir, que la producción sumó 1.239.300 litros.


Una de las primeras acciones que SABMiller realizó cuando compró la operación de Cervecería Nacional fue revisar la presentación de los productos, y encontraron que el objetivo de sus antiguos propietarios era enfocarse en las ganancias y no conocer las necesidades del consumidor.


Michael Harman, presidente del grupo Cervecería Nacional explicó que también se había perdido el contacto con el consumidor y una cerveza como Balboa no estaba siendo presentada en un envase suficientemente atractivo.


Este cambio es producto de un estudio del consumidor efectuado en el último año por el grupo cervecero con el interés de entender las necesidades del cliente, conociendo cómo querían que se le presentara el producto y en qué ocasiones lo consumían.


Por ello, que Cervecería Nacional decidió renovar la imagen de la cerveza Balboa que incluye nueva tamaño de la botella ya que pasó de 285 mililitros a 330 mililitros al mismo precio, es decir, $0,35 por unidad.


En este cambio también se destaca el nuevo diseño de la etiqueta y la tapa del producto, manteniendo el mismo sabor, pero con mayores controles de calidad en el proceso de producción. La idea detrás de esta renovación de imagen es tratar de elevar el producto como una “marca superior”.


La lata de la cerveza Balboa mantuvo su mismo tamaño y precio por unidad, $0,50 por unidad, pero también registró un cambio en el diseño. El grupo cervecero dijo que estos cambios van acompañados del lanzamiento de una campaña de mercadeo renovadora y de mayor visibilidad de la marca en sus puntos de ventas.


Harman dijo que la marca de cerveza Balboa es muy fuerte en Panamá y ya casi tiene 100 años de existencia en el mercado local. Aunque el grupo dijo que las expectativas de ventas son difíciles de predecir, están seguros de la nueva imagen de la cerveza Balboa va a revolucionar el mercado y estiman que tendrán un crecimiento de 5% para este año.


Cambios y competencia
SABMiller se mantiene constantemente revisando su portafolio de productos por lo que no descartan cambios en su sector de cervezas o en otras áreas del negocio. Un ejemplo de ello es la introducción de una nueva oferta de cervezas con la bebida Miller Gener Draft que está dirigida a un consumidor con un poder adquisitivo más alto. Tampoco les preocupa la competencia, aunque siempre se mantienen monitoreando lo que ellos hagan, sin embargo, el grupo está concentrado en el consumidor que adquiere sus bebidas y su relación con los productos. Capital Financiero intentó localizar al grupo de Cervecería Barú Panamá, pero al cierre de esta edición no había contestado aunque la solicitud se había realizado hace dos semanas.

Producción local de ron siguen creciendo.

ARTÍCULO TOMADO DE CAPITAL FINANCIERO



La alta calidad de las diversas marcas de ron elaboradas en Panamá, el aumento de la demanda de productos Premium en el mercado local y la cada vez más frecuente exportación a granel, son algunos de los factores que han permitido el incremento de la producción local de esta bebida, al punto que la misma está a un paso de igualar el nivel de producción del seco, un licor considerado como la bebida nacional.



De acuerdo con cifras de la Contraloría General de la República durante el primer trimestre de este año la producción de ron sumó 1.198.000 litros, lo que representa un crecimiento del 34,5% respecto al mismo período de 2006 cuando sumó 891.000 litros (Ver gráfico: Producción nacional de licores).



Esto significa que durante el primer trimestre de este año la fabricación de ron fue inferior a la producción de seco en unos 179.000 litros, una cifra significativamente menor a los 510.000 litros que separaban a la elaboración de ambos licores durante el mismo periodo del 2006.



No obstante, hay que advertir que la bebida alcohólica de mayor producción a nivel nacional sigue siendo por mucho la cerveza, y prueba de ello es que durante los primeros tres meses de este año su producción sumo los 49.149.000 litros, un 9,6% más que en el mismo período del año pasado.



Farid Gozaine, gerente general de Central Industrial Chiricana, S.A., empresa que elabora el Ron Carta Vieja, considera que el crecimiento de la producción nacional de este licor es producto de varios factores que están vinculados su la alta calidad, como el incremento de la demanda local y el incremento de las exportaciones de ron a granel.



El empresario también admite que este crecimiento en la producción de ron se debe al hecho de que existan por lo menos tres empresas dedicadas a su fabricación (Central Industrial Chiricana, S.A, Varela Hermanos, S.A. y Ron Bacardí) luchando por controlar el mercado local, lo que ha dado como resultado el incremento de la oferta de productos Premium.



Gozaine considera que otro elemento que está impactando positivamente en la producción de ron nacional es su creciente demanda en los mercados internacionales, algo que a su juicio se debe a su gran calidad, pues quienes lo adquieren son fabricantes de otros países que lo utilizan como materia prima para la elaboración de productos Premium.



Agregó que de continuar esta tendencia, en algunos años el ron superará al seco como el licor más producido a nivel local, ya que este último solo es producido por una sola empresa y no está en capacidad de competir con productos Premium.



Pero para Juan Carlos Varela, vicepresidente ejecutivo de Varela Hermanos, S.A., empresa que fabrica las marcas Ron Cortéz y Ron Abuelo, así como el Seco Herrerano, el crecimiento de la producción local de ron está vinculada más a su alta calidad y su creciente demanda en los mercados internacionales, que al crecimiento del consumo local.



Indicó que Panamá se ha posicionado como un país que produce rones de la más alta calidad, especialmente de rones añejos, lo que le ha abierto paso a las marcas locales en mercados como Costa Rica, Ecuador, Colombia, Chile, República Dominicana y Estados Unidos, y no solo para la venta al detal, sino también cada vez más en la venta a granel.



Sin embargo, Varela descartó que el ron pueda desplazar al seco como el licor más producido y consumido en Panamá, por considerar que este es un producto que está incorporado a la cultura nacional y los jóvenes lo han aceptado esta tradición, tal como ha ocurrido con los tamales y el sancocho de gallina.



Ricardo Martinelli, propietario de una de las cadenas de supermercados más grandes del país, Super 99, coincide con Varela en que todavía falta mucho para que el ron pueda equiparar los niveles de venta y consumo que registra el seco en el mercado nacional, pero no duda en advertir que la “pelea” entre estos licores es cada vez más pareja.



De hecho, Carlos Effio, gerente de compras de la cadena Super 99, advirtió que al verificar las ventas de las marcas de Seco (Herrerano, Espiga de Oro, Cañaveral y Seco Ice) y comprarlas con las de ron (Ron Abuelo, Bacardí, Carta Vieja, Don Q, y Cortez), la relación es de unidades 1,34 seco por cada 1,0 unidad de ron, lo que significa que las referencias de ron que mencionamos generan $1,23 en ventas por cada $1,00 de Seco.



Y aunque admite que estas cifras deben ser atemperadas por el hecho de que el seco es más económico que el ron y que existen diferencias en las forma como ambos son embotellados para la venta (volumen), insistió en que ha podido constatar que marcas como Ron Abuelo y Carta Vieja Añejo están teniendo un fuerte impacto ya que han encontrado una necesidad que no estaba siendo servida por los productos existentes.

Panes con aroma de mundo


ARTÍCULO TOMADO DE MARTES FINANCIERO.


Si usted es de los que va a la panadería solo a comprar michitas y pan de molde, se está perdiendo de muchos de los nuevos placeres que se están horneando en la ciudad de Panamá a diario.Más de 30 panaderías y pastele-rías han iniciado operaciones en esta metrópoli en los últimos cinco años, de acuerdo con las estadísticas del Ministerio de Comercio e Industrias (Mici). Y muchas de ellas son propiedad de pequeños empresarios extranjeros que intentan desarrollar un nuevo concepto del negocio y convertir sus locales en lugares de encuentro social y deleite gastronómico, más que en simples dispensadores de bollos de harina, levadura y azúcar al detal.


“En Panamá no hay una cultura del pan, como en Europa, Estados Unidos y la mayoría de los países de Suramérica”, comenta Douglas Guimaraes, dueño de la panadería y pastelería Viva el Pan, ubicada en el centro comercial Plaza Pacífica de Paitilla. “El negocio es todavía incipiente y por eso hay oportunidades”.Viva el Pan cumplió cinco años el pasado 5 de abril y durante su primer quinquenio acumuló más de un millón de dólares en ventas. “El negocio no está en el pan sino en los dulces”, aclara Guimaraes, un colombiano que ofrece más de 50 clases de panes y pasteles en su pequeño local y que, a fuerza de recetas bajadas de internet y consejos del maestro pastelero estadounidense Roger Smith, ha cautivado la preferencia de sus clientes.


Estos nuevos panaderos que están compitiendo con las cadenas tradicionales y de larga trayectoria, como Río de Oro, Mister Pan y Momy, le están apostando a una oferta de productos innovadora y cosmopolita.En Viva el Pan, por ejemplo, destacan las “conchas” y “bollitos” mexicanos, el “foccacia” y la “ciabatta” italianos, el pan de canela con pasitas al estilo colombiano, el pastel de malteada y el pecan pie estadounidenses, y la torta dominó (un bizcocho de vainilla y chocolate unido con dulce de leche). En Bread CO., la panadería del centro comercial Paitilla Mall, ofrecen pan gallego, pan de maíz, tortas de kalhua y los exclusivos “quesitos”.


Y en La Brioche Francesa de Vía Argentina son especialistas en baguettes francesas, danesitas con canela y pasas, pan de anís y delicias venezolanas como las “cachapas”, “tequeños”, “cachitos” y “panes de jamón”, que hacen sentir a los caraqueños que residen por estos lares como si estuvieran en casa (ver tabla: Oferta cosmopolita).“Los productos nuevos se están vendiendo muy bien y la innovación constante de la oferta ha sido muy bien recibida por el público en general, que de repente ya está un poco cansado de los panes tradicionales”, comentó Elizabeth Delgado, administradora de La Brioche.


En la Vía Argentina el auge panadero se huele con facilidad. La Brioche está compitiendo con otras cuatro panaderías: El Mundo del Pan, New York Bagel, Delicias Manolo y Sautro´s. Y hasta hace apenas dos meses competía con cinco, pero Mary & Janes cerró en febrero.“En Venezuela ha habido un boom gourmet fuerte en los últimos años que ha hecho florecer el negocio pastelero”, destaca Roberto Arias, uno de los propietarios de La Brioche. “La gente está fusionando postres, experimentando cosas, mezclando dulces con salados y creando ambientes que invitan a la gente a sentarse a disfrutar de esas pequeñas maravillas. Algo de eso es lo que queremos darle a Panamá”.


Pero estos venezolanos no solo están produciendo panes artesanales, también están dictando cursos de repostería y panadería para el público en general. El proyecto de centro de formación que presentaron en 2006 al Ministerio de Educación fue aprobado por las autoridades competentes y ahora hasta capacitan a sus potenciales competidores. “No solo damos las fórmulas, sino también las herramientas para el manejo básico de este tipo de negocios”, afirmó Arias.


Capital semillaLa inversión inicial que se requiere para abrir una panadería y pastelería como éstas en Panamá oscila entre 50 mil y 120 mil dólares. El monto depende principalmente de la ubicación y el tamaño del local, la capacidad de producción aspirada y la calidad de los equipos. En la actualidad, un horno panadero, una máquina para hacer café y un exhibidor-nevera sencillo cuestan alrededor de 6 mil, 3 mil y 4 mil dólares, respectivamente.Según los empresarios entrevistados, el margen de rentabilidad de este negocio se ubica entre 3% y 12%.


Y, para “subsistir” en él, es necesario vender como mínimo 700 dólares diarios.Franquicias en juegoEn Panamá hay cerca de mil 800 panaderías y/o pastelerías operando, que generan 180 mil plazas de empleo directas, informó la Asociación de Panaderías y Pastelerías de Panamá. La mayoría de ellas son pequeñas empresas familiares, otras han logrado maximizar sus ventas mediante una red de sucursales y, más recientemente, han llegado a instalarse en el país hasta franquicias internacionales, como la de la corporación costarricense Musmanni.


“En estos momentos contamos con 14 panaderías en Panamá y una de ellas es propiedad de un franquiciado panameño”, reportó Franco Pacheco, vicepresidente de la corporación.Pero este grupo tico no está dedicado al negocio artesanal, sino a la producción industrial y por volumen, que permite reducir los costos operativos y ofrecer productos más baratos. “Somos líderes en tecnología de masas congeladas y premezclados en la región centroamericana”, aseguró.


Sus clientes hablan bien de los croisant de Musmanni, porque la masa del hojaldre que usan como materia prima es de excelente calidad y el equipo francés con el que la procesan es uno de los mejores del mercado.Bienvenida la competenciaEl presidente de la Asociación de Panade-rías y Pastelerías de Panamá, Giacomo Tamburrelli, está convencido de que el encarecimiento de los insumos ha golpeado mucho más fuerte a los panaderos locales que la llegada de competidores extranjeros al mercado.


“El gremio ha sido más afectado por el alza indiscriminada de las margarinas, el azúcar, las harinas y la leche condensada, que en algunos casos ha llevado hasta duplicar los precios de la materia prima en el último año”, precisó.El gerente de la panadería Tamburelli, empresa que tiene más de medio siglo en Panamá, no hizo comentarios sobre las nuevas ofertas de panadería artesanal, pero sí restó importancia a los avances de los fabricantes de panes prefabricados.“No le tememos a ningún producto prefabricado que venga de afuera porque el 85% de los consumidores panameños prefiere ir a las panaderías y pastelerías que fabrican al momento”, alegó.


No todas son buenas noticiasAlgunas no son rentablesEl aumento de los costos operativos de las panaderías y pastelerías, producto del alza de las materias primas y del encarecimiento de los combustibles, la energía eléctrica y el gas; así como el tamaño relativamente pequeño del mercado local y la fuerte competencia, han obligado al cierre forzoso de varios establecimientos. El grupo Noel, por ejemplo, llegó a tener ocho sucursales y ahora solo tiene dos: Noel en El Carmen y Mister Pan en San Francisco,“En Panamá no han progresado mucho las panaderías, en parte porque no hay cultura del pan y también porque estamos en el trópico, aquí hace mucho calor, hay mucha humedad y los dulces engordan más”, comentó el dueño de Noel, un panadero de origen español con 30 años de experiencia en estas lides. Además, “no es fácil encontrar profesionales preparados para esto, es un negocio difícil”.


Pero Noel seguirá horneado. “Este oficio es un arte y tenemos que echar pa’lante,, venga lo que venga”. Por ahora, mantendrán su apuesta por la panadería artesanal, que es la que ha vuelto a ponerse de moda en el mundo, fabricando -entre otras cosas- panes estilo europeo, panes de granos y panes de masa agria, sin azúcar, sin grasa y con fermentación larga, en perfecta sintonía con la onda “light” y natural que gana cada vez más simpatías en los mercados.En Panamá aún estamos en pañales en el negocio del pan y la repostería. En Europa, por ejemplo, no solo hay gremios que reúnen a los empresarios y profesionales del sector, sino federaciones enteras, universidades del pan y comités científicos del pan, concursos y premios anuales a los mejores maestros pasteleros, congresos, conferencias y ferias del pan que reúnen todos los años a decenas de miles de personas, entre las cuales destacan Madrid Dulce Fusión, Pizza Future, Exposandwich, World Chocolate Master y el Salón Internacional de la Panadería, Confitería e Industrias Afines, mejor conocido como Intersicop.

Burbujeante crecimiento.


ARTÍCULO TOMADO DE MARTES FINANCIERO.


En Panamá la industria de gaseosas está creciendo a un ritmo de 9% anual. Pero este sector que genera al menos 120 millones de dólares anuales podría crecer mucho más. Solo en el primer trimestre de 2007 la elaboración de bebidas no alcohólicas creció 6.9% más que el año anterior.Si bien el consumo per cápita de bebidas gaseosas en Panamá es de 60 litros por persona al año, el dinamismo de la economía local y factores como el proyecto de ampliación del Canal y el boom de la construcción podrían, como ha pasado en otras industrias, empujar las cifras.


"Hay cabida para una tercera marca de gaseosas en el mercado", asegura Joaquín Méndez, presidente de Petite Bottling Company, la empresa local que distribuye la marca Unicola.La marca, que entró hace cuatro años al mercado panameño, se enfrenta a los gigantes del sector que tienen años de estar en la plaza y poseen un alto porcentaje de participación en Panamá. (Ver gráfica: Mercado de gaseosas).Tatiana Zarak de Del Valle, directora de mercadeo de Gaseosas y Maltas del Grupo Cervecería Nacional que distribuye entre otros productos, la marca Pepsi, ha visto en los últimos años una segmentación mayor en el mercado panameño.


Esto les permite -en el caso de la Cervecería Nacional- determinar dónde, cómo y quiénes están probando su producto.De allí su apuesta por estimular aún más la categoría de gaseosas y hacerlo "mirando de frente a los consumidores".Su competidor más cercano y el que posee la mayor participación de mercado en Panamá, Coca-Cola, asegura seguir creciendo en el segmento de bebidas carbonatadas con un incremento global de 4% en 2006.A la vez, su portafolio de bebidas, entre las que se incluyen los jugos, tés y aguas embotelladas, ha creci- do permitiéndole ocupar un lugar importante entre los exigentes compradores.Ahora los tres jugadores de la plaza están reforzando o estrenando estrategias para saciar la sed de los amantes de las bebidas carbonatadas, y de las no carbonatadas también.


Nuevas decisionesHace tres meses Joaquín Méndez tomó una determinación. Dejar sus otras obligaciones laborales y dedicarse 100% al negocio que hace cuatro años inició en el sector de Pacora, Petite Bottling Company, dedicada a la elaboración de refrescos carbonatados, como la Unicola.La decisión fue parte de un plan estratégico que venía desarrollando desde hacía algunos meses. Primero consiguió nuevas instalaciones para mudar la empresa más cerca de la ciudad y luego decidió que era tiempo de dedicarse en cuerpo y alma a esta nueva inversión.Méndez reconoce que estos primeros años han sido difíciles: el lugar donde estaban ubicados no era accesible, y los costos encarecían el producto.


"Las instalaciones no fueron diseñadas para este negocio, aunado a que el Gobierno no ofrece ningún incentivo a los industriales y hay que pelear contra la corriente", subraya.El presidente de la empresa dice no poder hablar de su participación en el mercado. "El market share no lo quiero medir, ni tengo los medios para hacerlo. Que lo hagan los otros. Yo estoy más preocupado en ofre-cerle al consumidor un producto de calidad a un precio más accesible", recalca.


Méndez sabe que cuando iniciaron tenía una participación de mercado de 2% y que quizás ahora no ha variado mucho, pero precisa que el instalar un nuevo local, que podría estar inaugurándose en agosto próximo, es una prueba de que el negocio sigue adelante.Además de Unicola, Petite Bottling Company produce refrescos con la fruta originaria de Brasil 'Guaraná', y la marca Luni con sabores de fresa, naranja y toronja. También en 2005 la compañía obtuvo los derechos exclusivos para utilizar el edulcorante Splenda en sus productos, con lo que lanza al mercado Unicola Light.


"Estamos dando un producto similar a los que ya tienen tiempo en el mercado, con igual calidad y a un precio más accesible. Esa es nuestra clave", afirma Méndez.Asimismo lanzaron al mercado panameño Seco Ice, introduciéndose en el segmento de coktails.Con esta oferta y la nueva inversión la compañía espera ahora sí poder cumplir con las necesidades del mercado que no han podido cubrir en los cuatro años que tienen de estar en la plaza. Méndez reconoce que siempre han "estado cortos" por la poca capacidad de la planta, y la demanda ha estado por encima de su oferta, pero confía que podrá cubrir la demanda con la nueva instalación.Su plan de desarrollo incluye el lanzamiento de nuevas gaseosas y coktails.


¿De qué se trata? El prefiere no hablar, dice que será una sorpresa. Su objetivo es ser una empresa pequeña, pero más eficiente."La competencia va a ser cada vez más global, y las plantas con demasiada capacidad van a exigir mucho dinero para mantenerse competitivos. Nosotros mantendremos una empresa pequeña y flexible, por lo que pienso que nos va a ir mejor en el largo plazo", enfatiza.Nueva imagen, mismo saborPepsi Co. lanzó este año al mercado una nueva imagen y en las neveras de los supermercados ya se puede ver la moderna apariencia de la gaseosa.La estrategia global consiste en mostrar símbolos con los que se identifican los consumidores de espíritu joven.


Tatiana Zarak de Del Valle, directora de mercadeo de Gaseosas y Maltas de Cervecería Nacional, que distribuye la marca en Panamá, señala que la estrategia es pensar siempre en el consumidor, sus exigencias, su estilo de vida y sus gustos, y de allí su fuerte presencia en las salas de cine, en competencias deportivas y en conciertos de artistas reconocidos.Con este nuevo rostro sería el décimo cambio que Pepsi hace en su empaque, en sus 109 años de existencia."Sabemos que el consumidor busca cosas diferentes, por lo que en Panamá tenemos seis diferentes diseños en donde si bien es cierto cambia su imagen, se mantienen sus íconos y contenido de manera que no pierde su identidad", indica Zarak de Del Valle.


En esa misma búsqueda de cosas diferentes, Zarak de Del Valle siente que la tendencia en el mercado es que haya un crecimiento en las gaseosas blancas, y Cervecería Nacional tiene un portafolio balanceado con productos como 7UP, Squirt y Ginger Ale."La industria de gaseosas está creciendo a un ritmo saludable, y las blancas están ocupando un lugar importante en este crecimiento", expresa.La estrategia de la Cervecería Nacional es estimular la categoría de gaseosas. Su objetivo es crecer un poco más que la industria, es decir más del 9%.A la par del lanzamiento al mercado de la nueva apariencia de Pepsi, sus distribuidores en Panamá, Cervecería Nacional, están inaugurando sus nuevas oficinas.


Se trata de tres mil metros cuadrados de superficie en la torre oeste del edificio Business Park en Costa del Este.Con esta mudanza no solo se integran los departamentos de finanzas, asuntos corporativos, legal, cadena de suministros, recursos humanos, ventas, mercadeo y la gerencia en un mismo local, sino que hay más espacio en la planta de producción para crecer y más aún cuando la demanda podría incrementarse en los próximos años.Evolución constanteEl promedio del consumo per cápita en América Latina, sin incluir México, es de 185 bebidas al año por persona.


Mientras que en mercados más desarrollados como México y Estados Unidos el consumo per cápita es de 400 a 500 bebidas al año por persona.Esta cifra es muy atractiva para la compañía Coca-Cola, que con sus más de 400 marcas ha logrado los primeros lugares en la venta de bebidas gaseosas, jugos, café, tés, bebidas energéticas y aguas embotelladas. Así lo asegura Olga Reyes, gerente de asuntos públicos y comunicaciones para Centroamérica de Coca-Cola, al tiempo que agrega que aún queda mucho espacio para crecer.En países en vías de desarrollo -explica- solo el 40% del consumo total de bebidas son aquellas empacadas y listas para consumir.


"Para triunfar en este mercado lo importante es innovar para dar a los consumidores productos de su agrado y que suplan sus necesidades", afirma.Las más recientes innovaciones de la compañía son el agua embotellada de sabores Dasani y Coke Zero, con el mismo sabor de la Coca-Cola, pero sin calorías. Esta última ha impulsado el crecimiento un 3% en las bebidas carbonatadas. Y mientras esto está pasando en su mercado global, en la región latinoamericana la marca está cosechando frutos. En esta región Coca-Cola tuvo un crecimiento de 7% en 2006.Reyes asegura que el mercado panameño tiene mucho potencial para crecer.


Su principal embotellador, Femsa, que tiene operaciones en Argentina, Brasil, Colombia, Venezuela, Costa Rica, Nicaragua, Guatemala, México y Panamá, ha reorganizado el negocio, mejorado la productividad y entrenado al personal de estos países. "Durante sus pocos años en Centroamérica, Coca-Cola Femsa ha mejorado su infraestructura y ha introducido mejores prácticas para vender las bebidas", afirma.Recientemente Femsa anunció la construcción de un megacentro de distribución y la ampliación de la capacidad productiva de su planta en Panamá. Una inversión que está por el orden de los 19 millones de dólares.Con este panorama las compañías que están compitiendo en el mercado local esperan atraer más mercado con sus estrategias particulares. Lograrlo no solo significará ofrecer bebidas carbonatadas de calidad, sino una oferta variada que le permita al consumidor elegir lo que desee beber para calmar su sed.

jueves, 18 de octubre de 2007

Salsas La sabrosita generan polémica.


ARTÍCULO TOMADO DE CAPITAL FINANCIERO.


La decisión de la cadena Super 99 de poner a disposición de sus clientes una nueva línea de pasta y salsas de tomate La Sabrosita no solo ha impactado en el desempeño de otras marcas en sus 29 sucursales, sino que además ha generado preocupación entre los tomateros locales, quienes aseguran estar siendo afectados por este tipo de importaciones.


La Sabrosita es una marca propia que se inició ofreciendo panes y dulces, productos a los que luego se agregaron las tortillas de maíz y ahora una pasta de tomate y seis variedades de salsa en presentación de 113 gramos, incluyendo únicamente los sabores más vendidos en Panamá. (Ver recuadro: Pastas y salsas de La Sabrosita).


Para Roberto Luzcando, vicepresidente de compras de Super 99, el uso de marcas propias es uno de los mecanismos que tienen las cadenas de supermercados para poder ofrecer a los consumidores un producto de buena calidad al menor costo posible, algo muy difícil de lograr cuando se trata de marcas establecidas en el mercado.


“Cuando le ofrecen a los consumidores un producto que es bueno, está hecho con productos de calidad y que el precio significa un porcentaje de descuento significativo sobre el precio de los líderes y el consumidor probará el producto”, dijo el ejecutivo del Super 99, quien agregó que la idea es establecer una competencia sana entre los jugadores en el mercado”.


Luzcando aseguró que desde su aparición en las estanterías de las 29 sucursales de Super 99, las salsas de La Sabrosita han ido ganando aceptación entre los consumidores asiduos que prefieren los servicios de dicha cadena de supermercados (Ver recuadro: Posición en ventas).


Pero a pesar de ser una marca propia de una cadena de supermercados panameña, las salsas La Sabrosita son fabricadas en Costa Rica por Industrias El Angel, empresa que también tiene su propia marca de salsas a la venta en los Super 99.


El producto ingresa al país amparado en un tratado bilateral de libre comercio que data de la década de 1970 el cual garantiza a los productos derivados del tomate un arancel preferencial, lo que permite que el producto sea más barato que otros que también se importan al país y eleva su competitividad frente al producto elaborado localmente.


Gisela Chávez, directora de Recursos Humanos y Relaciones Públicas de Nestlé Panamá, empresa que elabora los productos Maggi, reconocidos como los líderes locales en materia de derivados del tomate, no parece estar muy preocupada por la llegada al mercado de las salsas La Sabrosita.


De hecho, al comentar el tema se concentró en destacar que los productos de tomate Maggi son producidos y empacados en la fábrica de esa empresa ubicada en la provincia de Los Santos y que la materia prima utilizada en su elaboración es primordialmente nacional, lo que beneficia unas 8.000 personas en la región de Azuero.


En referencia a la entrada al mercado local de La Sabrosita y otros de productos derivados del tomate provenientes del extranjero, Pedro Castillo, presidente de la Asociación Nacional de Tomateros, dijo que están afectando directamente al productor nacional, dado que inunda el mercado con productos que incluso pueden ser triangulados.


Según Castillo, hace algunos años la producción de tomate en Panamá alcanzó las 35.000 toneladas anuales pero debido a la creciente llegada de productos importados se ha reducido a tal punto, que el año apenas sumo unas 12.000 toneladas.


El dirigente agrícola destacó que La Sabrosita no cumplen las normas de origen pactadas en el Tratado de Libre Comercio de nueva generación firmado recientemente entre Panamá y Costa Rica, ya ese país vecino no produce suficiente tomate para abastecer su mercado por lo que importa materias primas de terceros países, pero ingresan al país debido a que ese acuerdo todavía no ha sido ratificado por la Asamblea Nacional.


Agregó que pese a ello será difícil impedir que las salsas La Sabrosita siga ingresando al país ya que cuando el nuevo acuerdo comercial entre en vigencia Panamá tendrá que garantizar a Costa Rica el mismo nivel de acceso que goza actualmente.


De acuerdo con cifras de la Contraloría General de la República, la producción de derivados del tomate fue de 6.228 toneladas de enero a julio de 2007.

La Chiricana gana terreno en mercado de lácteos.


ARTÍCULO TOMADO DE CAPITAL FINANCIERO.


En la pequeña abarrotería “El Progreso” de Juan Díaz, los clientes buscan precios y variedad, entre los productos que compran en el establecimiento. Una de las bebidas que nunca falta en la mesa de los panameños es la leche, un producto en que los clientes de los pequeños comercios de víveres solo podían elegir entre dos marcas Estrella Azul y Bonlac, sin embargo, desde hace algunas semanas, empezó a llegar a este tipo de locales la primera remesa de La Chiricana, la cual comenzó a competir de inmediato frente a las clásicas marcas de lácteos.


Igual ocurre en los mini supermercados del centro de la ciudad de Panamá. Ante este fenómeno, los ganaderos y los distribuidores empiezan a considerar más la calidad de la leche que se vende a los consumidores locales, aunque algunos estiman que no todo lo define lo especial del producto, sino también la forma de publicitarse y la accesibilidad de precios.


Desde 2004 hasta la fecha, la leche La Chiricana fue consolidándose entre los lácteos de mayor consumo popular, siendo consumida en grandes cantidades en los supermercados, pero este año dejó de ser un producto exclusivo de las grandes cadenas dedicadas a la distribución de víveres.
Según Antonio Cabaleiro, director de marketing del Grupo Cervecería Nacional (CN), empresa que produce y distribuye “La Chiricana”, la razón que hace que los compradores adquieran la bebida es que el mercado lechero ha evolucionado en Panamá de manera muy positiva y el público busca novedad en las clases de lácteos como la leche evaporada, la semidescremanda o la deslactozada.


Mercado en crecimiento
El mercado de lácteos en Panamá se ha vuelto mucho más animado este año, gracias al lanzamiento de nuevos productos y al crecimiento del consumo. Por ejemplo, la Sociedad de Alimentos de Primera, S.A. (Bonlac) incursionó en el mercado de helados populares con el lanzamiento de Heladín, mientras que Productos Lácteos San Antonio, S.A. (Prolacsa) lanzó al mercado un producto destinado al mercado infantil, el queso Cheezpa.


Se trata de una expansión de la oferta que responde al crecimiento del consumo que se ha registrado en los últimos años, del que no se ha escapado la leche fluida. Históricamente el consumo per cápita de leche fluida en el país fluctuaba entre 15 y 19 litros. Hoy día las empresas que conforman la Asociación Nacional de Procesadores de Leche (Anaprole) estiman que esta cifra alcanza los 21 litros.


Según la Dirección de Estadística y Censo de la Contraloría General de la República, la producción nacional de leche pausterizada se cifró en 40.9 millones de kilos hasta el mes de julio de 2007, lo cual representa una caída de 0,4% respecto al 2006. No obstante, es importante tener presente que la producción local es insuficiente para satisfacer la demanda de las empresas dedicadas al procesamiento y producción de lácteos por lo que el mercado es abastecido mediante la importación de leche en polvo procedente de Europa y Nueva Zelanda.

Cabalerio asegura que CN tiene una producción de lácteos que asciende a un 35% del consumo local, acaparando “La Chiricana” el 24% de este total, mientras que el 11% restante corresponde a otros productos que son comercializados bajo la marca “Nevada”, que también distribuye el consorcio cervecero. Reconoció además, que La Chiricana ha recibido un fuerte impulso al lograr su colocación en las estanterías de más de 17.000 abarroterías en todo el país.


Clave del éxito
Para el vocero de CN, el atractivo del producto que comercializan se debe a que esta leche tipo Grado A recibe un proceso de “ultra pasteurización”, en donde el lácteo recibe un tratamiento a muy elevadas temperaturas por espacio de pocos segundos para matar las bacterias y luego se enfría, antes de ser remitido al envase al vacío o larga vida.


El proceso térmico para esterilizar sustancias alimenticias también se denomina “ultra alta temperatura” (UHT, por sus siglas en inglés), lo que garantiza un mayor período de vida si se compara con el de la leche pausterizada que ofrecen otras marcas.


Cavaleiro agrega también que desde que Cervecería Nacional adquirió la marca “La Chiricana”, se implantaron estrictas normas de calidad en toda la cadena de procesamiento y distribución de la leche, desde que sale de la vaca hasta llegar al mercado.


En el presente, cerca de 114 productores en Chiriquí envían exclusivamente el rubro a CN, empresa que realiza pruebas de campo y monitorea que el ciclo de producción sea regularizado, sin dejar que el lácteo pase por otros comercializadores no autorizados.


Otro factor es la percepción del consumidor que gusta ver la calidad de la leche, compararla y disfrutarla. “Algunos clientes dicen que les encanta ver el vaso pintado de blanco (luego de consumirla). Que le gusta ver la leche con viscosidad. El mismo eslogan del producto ha calado muy bien: “Pura desde su origen”, acotó Cavalerio.


La competencia
Frank Tedman, gerente de Operaciones de Industrias Lácteas, S.A., estima que la mejora de la economía nacional hace que aumente el consumo de los productos lácteos, por lo que descartó que el crecimiento en ventas de La Chiricana se haya registrado a costa de sus productos Estrella Azul. Pero admitió que la oferta de las empresas dedicadas al procesamiento de lácteos se está quedando chica para satisfacer a los clientes locales.


En cuanto a las tendencias de los consumidores, Tedman indica que “los panameños prefieren consumir productos frescos de mejores características y cualidades que las que ofrece leche de larga vida”. Es decir, que la mayoría de los consumidores prefieren la leche pasteurizada.


Contrario a lo planteado por Tedman, Cabaleiro señala que este proceso facilita a los consumidores populares disponer de un producto menos perecedero, evitando la necesidad de gastar energía para mantener refrigerada la leche y encareciendo el costo de la vida, factor que puede influir en la compra de una u otra marca de lácteos.


Para Marco Ameglio, vicepresidente de la Sociedad de Alimentos de Primera, S.A., que produce bebidas lácteas y jugos Bonlac la incursión de La Chiricana en los pequeños comercios es positiva ya que ayudará a dinamizar el mercado, obligando a sus competidores a encontrar vías para hacer frente a su oferta.


Aclaró que el mercado panameño de lácteos está abierto para todo el que desee introducir nuevas ofertas y que el principal beneficiado con esta realidad es el consumidor, que podrá elegir el producto que más se ajuste a sus gustos o posibilidades económicas.


Accesibilidad y precios
El asunto de los precios y la accesibilidad económica también definen el impacto del lácteo en el mercado Y no importa si el producto es exitoso o tiene una clientela fija. Euclides Díaz, secretario ejecutivo de la Asociación Nacional de Ganaderos (Anagan), estimó que la calidad del producto lácteo se refleja inmediatamente en el precio y que queda a discreción del consumidor si pagará por el mismo.


Para Díaz, la leche envasada al vacío es más cara que la leche distribuida al frío. “Usted encuentra el producto con un envase más caro, entre $1,00 y $1,05, y encuentras en el supermercado la leche fría a $0,80. La diferencia es el proceso. La maquinaria es más cara, el envasado es más caro”, destacó el dirigente de Anagan. El vocero de los ganaderos panameños admitió que el fuerte impulso publicitario de La Chiricana hace que los consumidores la busquen.

Se incrementa competencia en quesos procesados.


ARTÍCULO TOMADO DE CAPITAL FINANCIERO.


El queso procesado Superior Cheezpa es el nuevo producto que lanzó al mercado la empresa Productos Lácteos San Antonio S.A., (Prolacsa), que busca diferenciarse del popular queso Cremoso y de otras marcas como Kraft, Nestlé y Borden, para poder conquistar el creciente mercado infantil.


Según estimaciones de la Asociación Nacional de Ganaderos (Anagan), la producción de queso en el país, incluyendo el procesado y fresco, alcanzó el año pasado las 11.497 toneladas, mientras que el consumo local se situó en 10.708 toneladas.


En tanto, miembros de la Asociación Nacional de Procesadores de Leche, fija en 5.000 toneladas el consumo promedio anual de queso procesado a nivel nacional (Ver recuadro: Consumo y variedad).


Un mercado que es abastecido casi en su totalidad por fabricantes locales, con excepción de Kraft, siendo las marcas Cremoso y Superior las de mayor consumo, por lo que no es extraño que Prolacsa haya optado por orientar parte de su producción a un nicho de mercado en constante crecimiento como es la población infantil.


Se trata del queso Cheezpa el cual se diferencia de sus competidores porque está reforzado con vitamina B, hierro, ácido fólico y zinc.


María Cristina Pérez, directora de mercadeo de Prolacsa, dijo que el producto, que puede consumir toda la familia, está teniendo buena aceptación en el mercado y que su precio de venta promedio es de $2,75 por libra.


Indicó que a Prolacsa le tomó un año desarrollar el queso Superior Cheezpa, a diferencia de unos 105 quesos procesados, frescos y madurados que tomaron menos tiempo en estar listos para su comercialización y que distribuyen tanto en el mercado local como a nivel internacional.
Pérez agregó que para el próximo año Prolacsa espera exportar el Cheezpa a diversos mercados de Centroamérica y el Caribe.


Competencia en crecimiento
Por su parte, el gerente general de H. Tzanetatos, Inc. (consorcio propietario de Lavery Panamá, S.A.), Alberto Paz Rodríguez, Jr., dio la bienvenida al nuevo producto por ser otra alternativa para el consumidor.


Esta empresa elabora Cremoso, una de las marcas de quesos procesados de mayor consumo en el mercado local y cuyo precio promedio es de $3,25 por libra.


Una condición de liderazgo que Paz Rodríguez espera mantener, por lo que tienen pensado lanzar en los próximos años nuevos productos, un proceso que a su juicio no se limita a enfrentar la competencia que representa Prolacsa, sino la que se podría dar por parte de nuevas marcas que podrían ingresar al mercado local en un futuro.


“Por los altos precios y la escasez del queso a nivel mundial tenemos que medir qué tácticas vamos a ejecutar y en que momento, ya que es un mercado duro”, acotó.


Tzanetatos distribuye diversas presentaciones de queso procesado bajo la marca Cremoso, entre las que destacan las variedades regular, con jamón, con jalapeño y light, a los que recientemente se sumó el Cremoso Squeeze, el cual ha penetrado el mercado con dinamismo, por ser un producto versátil ya que puede ser usado por los consumidores en galletas, emparedados y cualquier tipo de salsas a base de queso.


El empresario manifestó que no han incursionado en los mercados internacionales porque la demanda local es sumamente elevada y existe poca disponibilidad de materia prima para generar los excedentes necesarios para cubrir las necesidades de otros mercados.


Nutrición
En tanto, Nilka Espada, nutricionista del Hospital Santo Tomás, sostuvo que es positivo que la industria local se preocupe por tener productos con un valor agregado nutricional, no solo que contengan azucares y grasas.


Considera que estos nutrientes ayudan muchas veces a cubrir las deficiencias que se presentan cuando la alimentación promedio no es la más adecuada y son requeridos especialmente en infantes y adolescentes en proceso de crecimiento. La especialista aseguró que el hierro eleva la hemoglobina y evita las anemias, mientras que el zinc ayuda al desarrollo de funciones inmunológicas y a factores internos del organismo.

Aumento de costo en materias primas impacta precio del queso procesado.


ARTÍCULO TOMADO DE CAPITAL FINANCIERO


El aumento del precio de la leche industrial en el mercado local y de la cuajada en los mercados internacionales, son los principales factores que han llevado el precio al consumidor del queso procesado a rondar los $3,00 por libra en los supermercados y ha elevado a $0,15 el valor de una rebanada en las abarroterías de todo el país.


Los ganaderos panameños producen anualmente unos 250.000.000 litros anuales de leche, a lo que se suman unas 10.000 toneladas de diversas partidas arancelarias de leche en polvo, leche fluida y materias primas para la fabricación de productos como quesos nacionales, procesados y madurados, que forman parte de los contingentes pactados a través de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y las cuotas de acceso otorgadas a otros países en diversos acuerdos de libre comercio.


A pesar de ello, el país enfrenta un importante déficit en la producción de leche debido a lo que la Asociación Nacional de Ganaderos (Anagan) define como una “falta de incentivo para la producción”, que consiste en el pago de precios bajos por la leche cruda por parte de las empresas procesadoras de lácteos, aún cuando en los últimos meses el precio de la leche industrial o grado C pasó de $0,21 a $0,26 por litro.


Una situación que refleja en gran medida la tendencia que según la Organización de Naciones Unidas para la alimentación (FAO) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), se registra a nivel internacional, en donde los precios de este insumo se han sido afectado negativamente debido a que la producción mundial ha rondando los 640 millones de toneladas durante los últimos tres años.


Y a este estancamiento de la producción hay que sumar el aumento de los costos de producción en el sector ganadero debido al incremento del petróleo, el uso del maíz y la soya para la elaboración de combustible y el incremento del precio de los insumos, lo que ha llevado el precio de la cuajada para la producción de quesos a rondar los $4.500 por tonelada, en lugar de los $2.500 por tonelada que costaba hace poco más de un año.


Todo lo cual se ha traducido en un aumento del precio al consumidor de uno de los productos que hasta ahora no podía faltar en el desayuno de una familia panameña promedio, el queso procesado (conocido popularmente como queso amarillo), cuyo costo por libra rondaba hace poco menos de un mes los $2,20 y ahora incluso llega a superar los $3,00, dependiendo de la marca y el comercio en que es adquirido (Ver recuadro: ¿Qué es el queso procesado?).


Roberto Maduro, gerente de mercadeo de Supermercados Rey, confirmó que los precios del queso procesado han sufrido un dramático incremento de precio en el punto de venta durante el último mes debido a que entre el 9 de julio y el 7 de agosto de 2007 esa empresa recibió cartas de cinco de sus principales proveedores, que agrupan más del 80% de las ventas, informando de incrementos inmediatos en sus precios.


Agregó que esas empresas justificaron la medida en factores como el incremento en los costos de manufactura y materia prima, así como al alza de fletes de carga marítima, pero aclaró que si bien el incremento de precio promedio fijado por los proveedores fue de 30%, Supermercado Rey sólo hizo un incremento promedio del 25%, reduciendo su margen de ganancia debido a la importancia del queso procesado en la canasta básica.


Pero este aumento no se ha limitado a las grandes cadenas de supermercados, ya que en las abarroterías de todo el país el precio de una rebanada de este popular producto pasó de $0,10 a $0,15.


Frank Tedman, presidente de la Asociación Nacional de Procesadores de Leche (Anaprole), explicó que esta situación es producto de varios factores como el reciente aumento del precio del litro de leche industrial que se paga al productor y la negativa de los ganaderos locales a permitir el ingreso al país de un contingente extraordinario de materias primas para la fabricación de productos lácteos.


Agregó que ambas situaciones se registran en un mercado deficitario en materia de producción leche, lo que tiene por consecuencia un aumento en los costos de producción, algo que se refleja especialmente en el queso procesado porque la materia prima importada para elaborar ese producto que llega al país fuera de los contingentes ordinarios pactados con la OMC pagan un arancel de 40%.


Víctor Pérez, propietario de Productos Lácteos San Antonio, S.A. (Prolacsa), empresa que fabrica el queso procesado que se comercializa bajo la marca Superior, considera que el aumento del precio al consumidor de éste y otros productos lácteos es consecuencia de los incrementos de las materias primas, especialmente del queso Cheddar, en los mercados internacionales.


A juicio de Pérez, esta situación pone en evidencia la necesidad de establecer condiciones que permitan o incentiven la producción de leche industrial en el mercado local no solo para fabricar queso procesado para el mercado local, sino también otros productos lácteos como los quesos madurados destinados al mercado internacional, un área en la que considera existen grandes oportunidades de negocios para el país.


Y aunque reconoció que el incentivo más importante para favorecer la producción de leche industrial es el incremento de los precios que se paga a los ganaderos, también advirtió que en este renglón es necesario tener en cuenta que estos cambios afectan los precios de los productos lácteos al consumidor, un tema en el que se debe ser cauteloso para no generar una contracción del consumo.


Pero para el secretario ejecutivo de Anagan, Euclídes Díaz, el aumento de los precios de los productos lácteos es producto del incremento del precio de las materias primas en los mercados internacionales y de la falta de visión de las empresas procesadoras, las cuales desincentivaron la producción local de leche al pagar a los ganaderos precios por debajo de los costos de producción para subsidiar sus operaciones.


Explicó que durante años el precio del litro de la leche industrial fluctuó entre $0,19 y $0,21 por litro, lo que llevó a muchos productores a abandonar la ganadería de leche, pero esta situación no es sostenible en este momento porque el precio equivalente del litro de leche en los mercados internacionales es de $0,63.
Díaz negó que el aumento del queso procesado sea una consecuencia directa del incremento del precio de la leche industrial o grado C a $0,26 por litro, ya que el mercado local solo suple el 30% de la materia prima necesaria para la fabricación de este producto, pero advirtió que la única forma de frenar nuevos aumentos es incrementado la producción local leche, para lo cual su precio al productor debe equiparar el precio del mercado internacional.

Nuevo competidor en el mercado de bebidas.


ARTÍCULO TOMADO DEL CAPITAL FINANCIERO.


En medio de un bosque primario ubicado a solo 80 minutos del centro de la ciudad capital, la empresa Panama Spring invirtió $5 millones en una planta dedicada a extraer, procesar y embotellar el agua que brota de un manantial de origen volcánico. Su producto final se denomina Panama Blue, una nueva marca de agua mineral que entrará a competir en el creciente mercado de agua embotellada.


La planta embotelladora de agua Panama Spring se encuentra ubicada en Cerro Azul unos 800 metros sobre el nivel del mar, una zona boscosa donde la temperatura promedio es de 17 grados centígrados.


El agua que es procesada por esa empresa procede del Parque Nacional Chagres, sin embargo, lo que parece marcar la diferencia respecto a otras marcas de agua embotelladas que se elaboran en el países que la misma fluye de un manantial formado por rocas de origen volcánico, que además de filtrarla nutre de minerales que favorecen la salud de quienes la consumen.


Según Jaime Ortiz, director de Panama Spring, “en esta área el suelo está limpio y rodeado de bosques primarios, es muy estricto en materia de salud, porque hay que entender que las medidas de seguridad son bien complicadas y hay que cumplirlas”.


La Ingeniera Linnette Price encargada de gestión de calidad, explicó que el proceso de embotellado es largo ya que primero se filtra el agua, luego se utiliza luz ultravioleta para inactivar las bacterias y después se utiliza ozono para limpiar la botella y que quede desinfectada.


Gracias a todas estas medidas esta agua embotellada registra una presencia de bacterias o carga orgánica de ocho por volumen, aún cuando las autoridades de salud y las normas internacionales establecen un límite máximo de 100.


El agua mineral Panama Blue ya está disponible en algunos supermercados y el precio de la botella de 500 mililitros es de $0,60 a $0,75.


Competencia
En el mercado panameño hay aproximadamente 50 marcas de aguas, dentro de esas se encuentra la marca Brisa que es producida y comercializada por Cervecería Nacional S.A.
Antonio Cabaleiro, director de marketing de Brisa, dio la bienvenida al nuevo producto ya que a su juicio “en la medidas que entran más empresas al mercado, las personas se acostumbran al consumo de este producto y las ventas del mismo se incrementan”.

Cervecería Barú Panamá ajusta los precios de Heineken y Budweiser


ARTÍCULO TOMADO DE CAPITAL FINANCIERO.


Con el objetivo de cubrir los diferentes segmentos del creciente mercado panameño y de adecuarse a los estándares internacionales, Cervecería Barú Panamá reestructuró los precios al consumidor de sus productos Premium Heineken y Budweiser fijando en $0,50 y $0,40, el costo de sus presentaciones de 330 y 300 mililitros, respectivamente.


La empresa, que desde el 2002 está bajo el control de Heineken NV y Florida Ice and Farm Co., produce las cervezas nacionales Panamá y Soberana, así como las internacionales Guinness y Warsteiner, a las que en enero de este año se sumó Budweiser, la cual es fabricada bajo licencia.
También distribuye en el mercado local las marcas Tecate y Paulander, así como de Heineken, considera como una de las marcas Premium más importantes del mercado internacional.


Una oferta de productos que a juicio de Cervecería Barú Panamá cuenta con presencia en todos los segmentos del mercado, por lo que el momento es ideal para reestructurar su política de precios y ajustar mejor la relación entre cervezas nacionales e internacionales.


Un cambio en el que destaca el nuevo precio sugerido al público de Heineken, el cual será de $0,50 para su presentación en botella 330 mililitros, lo que representa un “Price Premium” de 40% sobre cervezas nacionales, en tanto que la Budweiser se comercializaría al por menos en $0,40, lo que colocaría su “Price Premium” un 15% por encima de sus competidoras locales.


Cervecería Barú Panamá asegura que con estas nuevas tarifas, sus precios están más balanceados, ya que sus cervezas de fabricación local, Panamá y Soberana, mantendrán sus actuales precios sugeridos al público, que en el caso de la de botella de 355 mililitros es $0,35 y en el de la botella 285 mililitros o “pinta”, es $0,30.


Este cambio en la política de precios de Cervecería Barú Panamá no genero ningún comentario por parte la Cervecería Nacional, su principal competidora en el mercado local, ya que según Alejandro Félix de Souza, vicepresidente de Asuntos Corporativos de esa empresa, se trata de una estrategia comercial que debe ser respetada.

Panameños consumen180 botellas de Coca Cola al año.


Cada panameño se bebe 180 botellas de Coca Cola al año, uno de los consumos per cápita más altos de la región Centroamericana. La bebida más famosa del mundo ha conquistado el paladar de los panameños y al concluir el presente años los directivos de la empresa esperar obtener un crecimiento de dos dígitos. El gerente legal y Asuntos Corporativos para Centroamérica de Coca Cola-Femsa, Arturo Campos, explicó que “Panamá es un país al que le estamos poniendo mucha atención”.


Y prueba de ello es que actualmente esta firma construye un centro de distribución en la Transístmica a un costo superior a los siete millones de dólares; la mayor inversión que la transnacional realiza actualmente en Centroamericana. El consumo de Coca Cola de los panameños es muy similar al que se registra en Costa Rica y Guatemala, pero superior a Nicaragua donde el consumo per cápita alcanza las 170 botellas al año. Campos expresó que se trata de “una población con un estómago medianamente maduro”. Sin embargo, Panamá está muy distante de países como Estados Unidos y México donde el consumo per cápita es de 500 y 400 botellas al año, respectivamente. arroz, la leche el queso, el ñame, han aumentado en los últimos meses. La Estrella de Panamá, 21 de septiembre de 2007.

Renuevan imagen de Cerveza Atlas


ARTÍCULO TOMADO DEL CAPITAL FINANCIERO.


La Cervecería Nacional, lanzó al mercado la nueva imagen de la cerveza Atlas, una de las líderes en ventas en el mercado local, la cual contará ahora con una botella etiquetada de 330 mililitros y una lata en la que domina los colores rojo, azul, blanco y plateado.


El nuevo diseño de las latas de aluminio y de las etiquetas de la botella resalta elementos que distinguen a Atlas, a los que ahora se le añaden las estrellas azul y roja de la bandera y el mapa de Panamá, además de un mayor énfasis en sus colores azul, blanco y rojo, considerados como los colores que representan la nacionalidad panameña los que la visten de patria, a los que se suma el color plateado.


No obstante, la Cervecería Nacional asegura que lo más importante es que con este relanzamiento los consumidores seguirán disfrutando del mismo sabor y calidad de Atlas, mientras que obtendrán más de su producto por el mismo precio, ya que la nueva botella aumenta su volumen de 285 mililitros a 330 mililitros.


Según Claudia Ante, vicepresidente de mercadeo de Cervecería Nacional, todo este proceso de cambio de imagen no es más que un homenaje a sus consumidores, quienes se han mantenido fieles a la marca y al sabor que identifica a los panameños en Panamá y en el extranjero.


Pero Michael Harman, presidente de Cervecería Nacional, admitió que la nueva imagen tanto de cerveza Balboa como de cerveza Atlas, también responde a la necesidad de la empresa de generar economías de escala ya que ambas marcas utilizarán ahora la misma botella, haciendo más eficiente el proceso productivo y ofreciendo a los consumidores adquirir productos con presentación de nivel internacional.


Aunque aclaró que los ahorros que puede generar este cambio son limitados ya que el simple hecho de lanzar al mercado una nueva imagen para estos productos implica una importante inversión económica. Actualmente Cervecería Nacional cuenta con productos, que incluye marcas de cervezas, gaseosas, agua y jugos. Se trata de un total de 19 marcas: Atlas, Balboa, Corona, Miller, Malta Vigor, Pepsi, Pepsi Light, 7Up, 7Up Light, Canada Dry (Ginger Ale, Quinac o Agua Tónica y Club Soda), Squirt, Mirinda, Orange Crush, Mountain Dew, Root Beer, Agua Brisa, Leche Nevada (entera, descremada, deslactosada, Choco Rico y Avena), Leche La Chiricana y jugos Tutti Fruti.

El camino apenas empieza.


ARTÍCULO PUBLICADO EN MARTES FINANCIERO


Michael K. Harman es el hombre que el grupo SABMiller eligió en 2006 para llevar a cabo la integración de la Cervecería Nacional (CN) al corporativo. El proceso era mucho más que nombrar a un gerente. A Harman le tocaría implementar nuevas formas de trabajo, analizar a sus consumidores y encontrar el modo de darles algo nuevo sin perder su principal atractivo: el sabor.En un año de gestión los resultados están a los ojos de todos: cambio de oficinas, nueva imagen para los productos y una campaña promocional que incluye la visita del equipo japonés de béisbol que ostenta el título de campeón del Clásico Mundial.


“Para nosotros Atlas es la cerveza para compartir grandes momentos con toda la nación, por eso elegimos unos juegos de béisbol a los que asistirán más de 4 mil personas en Herrera, 4 mil en David y alrededor de 24 mil en Panamá”.Aunque todo esto no es el trabajo de un solo hombre, la experiencia previa de Harman fue decisiva para el logro de los objetivos iniciales.El ejecutivo estadounidense lleva casi 10 años en el grupo cervecero y se ha encargado, entre otras cosas, de la integración de Miller Brewing Company y South African Breweries (SAB), en 2002.


Para Harman la estrategia de SABMiller en Panamá, ha sido la satisfacción de sus clientes, pues aunque consideraron que no era necesario hacer modificaciones en la fórmula, sí debían corregir otras partes del proceso de producción.Lo primero fue hacer sentir a los empleados que eran parte del cambio, hacer investigaciones para conocer a sus consumidores y realizar las inversiones necesarias.Luego de exhaustivos estudios de mercado, la cervecería estuvo lista para relanzar sus productos principales: Pepsi y las cervezas Atlas y Balboa.


“Estamos al principio de una fase más larga que nosotros definimos como ejecución”, afirma Harman, quien sin dar detalles anuncia que todavía tiene muchas cartas bajo la manga y que a las otras 16 marcas que maneja la cervecería las atenderán con la misma pasión.Con este enfoque la Cervecería contrató a 500 personas, que trabajaban de forma externa con la empresa.“Pensamos que el cuerpo de ventas y la gente de distribución, las personas que interactúan con nuestros clientes, deben ser parte de la compañía, porque queremos estar seguros de que recibirán entrenamiento y motivación constantes”.


Harman aclara que no se trata de internalizar todos los procesos de la empresa, sino aquellos que tienen relación directa con el consumidor.Sobre las inversiones que SABMiller ha hecho en la reestructuración, Harman se limita a decir que “estamos convencidos de que mejorando la imagen del producto, el tamaño y el mercadeo vamos a crecer más rápido que nuestros costos”.Del frío al calorAntes de llegar a Panamá, la vida de Michael K. Harman había transcurrido en un clima muy distinto al tropical, primero en su natal Estados Unidos y después, por más de 10 años, en Rusia.


En 1993, tan pronto como terminó su maestría en estudios internacionales en la Universidad de Pensilvania, se mudó a Rusia para trabajar con el grupo Barents ofreciendo asesoría financiera a las empresas emergentes de los países de Europa del Este. De Barents pasó al grupo agroindustrial ruso Cherkizovsky como director financiero y finalmente en 1999 a Transmark, una subsidiaria de SAB. Luego se ocupó de la integración entre SAB y Miller, y entre los años 2003 y 2006, de las operaciones de Kompania Piwowarska, la subsidiaria del grupo en Polonia.Acostumbrado a desenvolverse en distintos escenarios geográficos y culturales, Harman asegura que la adaptación a Panamá no fue traumática, pero reconoce las grandes diferencias.


“Cuando veo el calendario no puedo creer lo rápido que pasan los meses, simplemente porque el clima es el mismo todo el año. Estaba muy acostumbrado al frío y ahora estoy a 35 grados”, explica.Tal vez sea por eso que Harman ha tenido “ojo” para resaltar la cualidad de las cervezas panameñas como refrescantes.En cuanto al idioma, ha demostrado en las entrevistas que entiende muy bien el español y que lo habla “si es necesario”, pero reconoce que todavía no ha logrado la fluidez que sí tiene en ruso o polaco.


Aun así, Harman se muestra contento y sobre todo entusiasmado con los nuevos pasos que está dando la cervecería a su cargo, pues considera que todavía queda mucho espacio para crecer.“Más gente está viniendo a Panamá y creemos que estarán en busca de mejores marcas”. EXPERIENCIAPresidenteMichael K. Harman tiene una maestría en administración de empresas de Wharton School of Business y otra de estudios internacionales de la Universidad de Pensilvania.Luego de ocupar diversos cargos en compañías trasnacionales, en 1999 llegó a Transmark Moscú, una de las subsidiarias de SAB. En 2002 lideró la integración entre Miller Brewing Company y SAB.Entre 2003 y 2006 fue vicepresidente de Kompania Piwowarska, subsidiaria en Polonia del grupo cervecero.

Bonlac lanza helados de consumo masivo


Artículo tomado de Capital Financiero.



La lucha de las empresas dedicadas a la producción de lácteos por conquistar el paladar de los más pequeños sigue creciendo, y prueba de ello es la decisión de la Sociedad de Alimentos de Primera, S.A. (Bonlac) de entrar al mercado de helados de consumo masivo, una batalla que se libra en las abarroterías y mini supermercados de todo el país.


Hasta ahora, Bonlac había concentrado sus esfuerzos en la producción de helados tipo Premium, que seguían la receta casera de su fundador Pedro Ameglio Tibaldero, los cuales son comercializados en envases de un galón, medio galón y un cuarto de galón, pero cuyos precios fluctúan entre $1,21 y $4,91, dependiendo del tamaño y el sabor seleccionado. Estos costos son ligeramente superiores al de los helados de consumo masivo elaborados por sus competidores.
Sin embargo, en los últimos años la empresa ha iniciado una agresiva campaña de lanzamientos de productos orientados a un segmento de mercado en constante crecimiento, como lo es la población infantil.


Este esfuerzo por diversificar su oferta de productos y a la vez conquistar el paladar de niños y niñas se inició con el lanzamiento de la gelatina Bongel, seguido de la entrada al mercado del dulce de leche tipo arequipe y ahora se extiende al segmento de helados, con la llegada de los denominados Heladin Bonlac (Ver recuadro: La oferta de Bonlac). Se trata de un helado que incluye los tres sabores más populares entre los consumidores locales, vainilla, fresa y chocolate, los cuales son comercializados en envases de tres onzas, a un precio de $0,20.


Con este producto Bonlac entrará a competir directamente con su principal rival, Industrias Lácteas, S.A., empresa que elabora los Helados Estrella Azul, que se estima controlan el 80% del mercado. Marco Ameglio, uno de los principales directivos de Sociedad de Alimentos de Primera, S.A., dijo que con esta línea, esa empresa espera ofrecer a los consumidores un producto de alta calidad, nutritivo y a un precio accesible.


Agregó, que Heladin ya está en el mercado y que está seguro que rápidamente ganará una importante cuota de mercado, tal como ha ocurrido con todos los productos que Bonlac ha ofertado a los consumidores, especialmente en aquellos que están dirigidos al público infantil.
Por su parte, Frank Tedman, gerente de producción de Industrias Lácteas, S.A., dijo que la competencia siempre es bienvenida y Helados Estrella Azul así lo ha demostrado, ya que con su alta calidad ha podido mantenerse en la preferencia de los consumidores a pesar de la llegada al mercado local de una gran cantidad de productos importados.


Destacó que con el lanzamiento de Heladin de Bonlac quienes realmente ganarán son los consumidores, que tendrán la oportunidad de elegir entre dos productos nacionales de primera calidad y optar por el precio que mejor se ajuste a sus necesidades, lo que a todas luces es positivo para el país.


Tedman adelantó que Industrias Lácteas, S.A. está actualmente diseñando una nueva planta para la producción de helados, pero aclaró que el objetivo de esta inversión no será enfrentar la competencia de Bonlac en el mercado doméstico, sino más bien tratar de aprovechar las oportunidades que se abrirán para los procesadores de lácteos a través de los Tratados de Libre Comercio.


Pero no todas las empresas dedicadas a la producción de lácteos están interesadas en incursionar en la elaboración y comercialización de helados. Así lo reconoció Víctor Pérez, presidente de Productos Lácteos San Antonio, S.A. (Prolacsa), quien dice que su empresa prefiere mantenerse en la producción de leche, yogurt, queso procesado y quesos madurados, productos para los cuales solo requiere una línea de distribución.


Explicó que la distribución de helados requiere una fuerte inversión en camiones refrigerados capaces de mantener congelado el producto, mientras que en el caso de los otros lácteos el nivel refrigeración es menor, y aunque existen camiones con capacidad para transportar ambos tipos de productos, desarrollar un sistema eficiente de distribución toma tiempo y carece de garantías de éxito.

Fallo contra Splenda no aplica en CA.


McNeil Nutritionals Ltd., fabricante del endulzante Splenda, informó ayer que acató el fallo de la corte de París sobre la publicidad de sus productos. Los lemas cuestionados son "Porque viene del azúcar, la sucralosa sabe a azúcar" y "Con sucralosa: viene del azúcar y sabe como el azúcar". Splenda es un compuesto químico, que resulta de la adición de tres átomos de cloro al azúcar. "Esta decisión únicamente aplica a los Productos Endulzantes Splenda en Francia y no impacta de ninguna manera el empaque y la publicidad utilizada en el mercado de Centro América (CA)", señala un comunicado de la empresa. Estos lemas seguirán siendo utilizados en productos que se venden en CA. La empresa añadió que "cumplirá con la decisión de la corte haciendo unas revisiones mínimas a los empaques y a la publicidad utilizada en Francia. Por este medio queremos confirmar que no se retirará el producto en ningún país del mundo". La corte francesa ordenó retirar todos los productos cuyos empaques tengan los lemas objetados, por considerar que constituyen publicidad engañosa. La Prensa, 26 de julio de 2007.